En el hemisferio norte, el día 24 de junio se celebra el día más largo del año. Definitivamente no es un día como los demás. El hombre, la naturaleza y las estrellas se disponen a celebrar una fiesta muy especial, cargada de gran poder y magia. Las hadas y deidades de la naturaleza se dejan sentir por los campos mientras que los hombres aprovechan para vivir un momento en el que los elementos del agua, fuego y tierra, adquieren una connotación fuera de lo común.
La noche de San Juan , es la fiesta de los conjuros empleados para alejar los males, tanto de las personas como de los animales a través del fuego con su poder purificador. Y para ello se queman objetos viejos como una actitud renovadora.
Dentro de los mitos históricos, el agua es otro de los elementos presentes, a la cual se le creía que ese día curaba la sarna. Aún hoy, es costumbre saltar la hoguera conjurando la frase “sarna fuera”. Otro rito era sacar a los animales al amanecer al campo, para que fueran mojados por el rocío de la noche y beneficiarse así de la magia y bondades de esta agua natural.
La tierra, representada por árboles y ramas del año anterior, eran quemadas en el ritual durante esta noche y pasadas sus cenizas por los cultivos para proteger las cosechas. Por supuesto, hoy en día, la fiesta no posee las connotaciones místicas de antaño, aunque esta noche sigue siendo muy especial, sigue siendo… “La gran noche”.
A mitad de tarde, los habitantes del pueblo , se reúnen junto a la ermita de San Juan, en el barrio del mismo nombre, para degustar unas exquisitas sardinas asadas acompañadas de un buen vino. Los mayores, acompañados siempre de los grandes protagonistas de toda fiesta que se precie… los niños, comienzan a organizar una gran hoguera junto a la ermita.
Alrededor de este fuego purificador, todos disfrutan escuchando cuentos misteriosos, degustando las sardinas, bailando, charlando animádamente, saltando la hoguera… en definitiva intentando ser guardianes de las culturas que las generaciones van transmitiendo durante el paso de los tiempos.
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