Arenal d'en Castell
Enigmática y con una oferta muy variada, Menorca nos invita a disfrutar de varios destinos en uno solo. Historia, naturaleza, gastronomía, cultura y diversión se dan la mano en la hermana balear más tranquila y sosegada
No te pierdas una visita a la capital, Mahón (o Maó), un día entre semana. Comienza la jornada tomando el desayuno en alguna cafetería del paseo marítimo, viendo el ir y venir de los barcos, disfrutando de la brisa y de la visión de las mansiones que bordean la bahía. Ese sabor salado y el aroma a mar lo puedes perpetuar con una visita a su mercado de abastos donde las grandes piezas expuestas llamarán tu atención.
Recomiendo conocer las destilerías de ginebra Xoriguer. La aparición de esta bebida espirituosa se debe a la ocupación británica que tuvo lugar en el siglo XVIII. Los soldados ingleses la requerían en la tabernas y los artesanos menorquines se decidieron a importar bayas de enebro y a fabricarla ellos mismos. Esta bebida que se elaboraba para consumo local comenzó a comercializarse a mayor escala bajo el nombre de Gin Xoriguer ya en el siglo XX. En las instalaciones de la destilería se puede apreciar los alambiques originales. Y si la ginebra sola os parece demasiado fuerte no dudéis en pedir pomada, que es un combinado con limonada con una proporción de uno a dos.
La pequeña ciudad de Ciutadella es una auténtica joya de reducidas dimensiones, algo que se agradece ya que es un placer recorrerla a pie y perderse por sus callejuelas que rezuman historia y leyendas. Un buen comienzo para descubrirla puede ser la plaza des Born, fácilmente reconocible por su obelisco, que conmemora el saqueo de los turcos en 1558, y que está rodeado de edificios emblemáticos.
El sonido de los pasos sobre la piedra te conducen hasta la Catedral que se yergue sobre una antigua mezquita y exhibe un gótico sencillo. Su aire distinguido y señorial se entiende perfectamente cuando se es consciente de su capitalidad hasta el siglo XVIII. Los palacios que jalonan la urbe, como el de Torre Saura, el de Salort o el de Martorell, no sólo sorprenden por sus fachadas sino por su rico interior.
Para descansar del aire nobiliario y del previsible calor veraniego, nada mejor que dirigirse a alguna de las múltiples terrazas que se dan cita en el coqueto puerto. En su kilómetro de extensión desprende actividad tanto de día como de noche, a veces es complicado encontrar una mesa libre.
Si comparamos el Caribe con las costas menorquinas habrá algunos que nos llamen exagerados pero basta aconsejarles que conozcan alguna de las playas y calas de la isla para que puedan corroborar la realidad de esta afirmación.
Las playas, las hay para todos, desde las cercanas a las poblaciones, muy accesibles y con multitud de servicios como Son Bou, a las más recónditas y vírgenes. Estas segundas, suelen estar enmarcardas por un entorno natural único, pinares, rocas, barrancos o sabinas. Algunas sólo accesibles por mar o a costa de una larga caminata por el campo.Entre ellas, por el Sur están las cala Macarella, Macarelleta, Turqueta... donde el color cristalino y turquesa te invita al baño. En el Norte, en un paisaje más lunar y con sus arenas rojas, Cavallería, Binimel'la, Pregonda...etc.
Cala Turqueta
No podemos terminar este reportaje sin invitaros a conocer también la noche menorquina, que quizás sea menos desmedida que la ibicenca o la mallorquina pero que es igual de placentera. Disfruta de una puesta de sol y una copa desde la Cova d’en Xoroi y pide que te cuenten la leyenda. Estremecedora.
- La isla pertenece a la Reserva de la Biosfera.
- El puerto de Maó con sus casi 7kms es el puerto natural más grande de Europa.
- La distancia a Mallorca en línea recta es de 37 kms.
- El Camí de cavalls (camino de caballos) es un sendero que bordea toda la isla y tiene una longitud de 220 kms.
- La isla de Menorca cuenta con 75 playas.
- La longitud máxima de la isla es de casi 48 kms y la anchura de 20 kms.
- La isla cuenta con cerca de 72.000 kms (sí, no me he equivocado) de pared -seca (tapias de piedra sin cemento)
- La isla cuenta con 7 faros.
- El viento del Norte (la Tramontana) alcanza en invierno los 100 kms/hora.
- El Monte Toró (358 mts) es la mayor altura de la isla y desde él se puede divisar toda ella.
- Hay una preciosa lagartija (Podarcis lilfordi) que sólo se da en ésta isla.
- La caldereta de langosta es su plato típico y la pomada (Gin Kas) su bebida tradicional.
Pomada en porrón...ya te digo, de Bilbao !!. |
- Las "abarques" (albarcas) son las sandalias típicas de Menorca.
Estos peñascos que el aire marino perfuma, guardan con su imponente belleza la leyenda de una historia de amor.
Xoroi, hombre de ignoto pasado que llegó por mar, nadie sabe cómo, posiblemente único superviviente de algún naufragio, se refugió en la cueva.
Las casas de campo de los alrededores sufrían frecuentes pillajes. De una de estas casas desapareció una bella moza próxima a casarse. Pasaron meses y años...
Nada más se supo de la joven desaparecida. Un día de invierno, la isla se vistió de insólita nevada. En la nieve aparecieron pisadas delatadoras.
Hombres armados siguiendo las huellas descendieron a la Cueva. En la gruta encontraron un hombre, una mujer y tres hijos fruto de su amor.
Xoroi, al verse acorralado e impotente, se lanzó al mar seguido de su hijo mayor. El mar que lo había traído, se cerró sobre ellos guardando el misterio de su vida.
Desconsolados, la mujer y sus dos hijos fueron trasladados a Alaior donde vivieron y tuvieron descendencia.
Menorca: única y diferente, misteriosa y tranquila.
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